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Las artes

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Dr. Francisco Javier García Marco (Univ. de Zaragoza)

Arquitectura

La comarca y la ciudad de Daroca ofrecen ejemplos de un gran número de estilos artísticos en una multitud de lugares de interés, desde los legendarios restos celtibéricos, romanos e islámicos hasta hermosas iglesias barrocas, pasando por edificios románicos, góticos, mudéjares y renacentistas.

Todos ellos tamizados por su adaptación al singular medioambiente de las serranías ibéricas, que les confiere un sabor peculiar a través de materiales característicos y una sorprendente luminosidad.

Sin embargo, los dos estilos de más interés presentes en nuestra zona son, sin duda, el mudéjar en todas sus variantes -románico-mudéjar y gótico-mudéjar- y el barroco.

En la zona del Jiloca medio podemos disfrutar de torres mudéjares románicas, de tradición hispanomusulmana, de planta cuadrada y de espléndidos ejemplares tardomudéjares.

El  barroco también es omnipresente en la comarca de Daroca-Calamocha, no sólo a través de edificios de nueva planta, sino a partir de los numerosos elementos añadidos y reformas que en los siglos XVII y XVIII sufrieron la mayor parte de las iglesias de la zona.

Algunos edificios, singularmente la iglesia colegial de Santa María de los Santos Corporales proporcionan una síntesis magníficamente yuxtapuesta de toda la historia del arte del Reino de Aragón, desde el Románico hasta el Neoclásico.

Si bien los edificios más relevantes son en su mayoría templos, la comarca ofrece un amplio elenco arquitectónico civil: palacios y casas solariegas, obras de ingeniería -puentes y túneles- y, especialmente, sorprendentes ejemplos de castillos y fortificaciones, entre los que destaca el propio recinto amurallado de la ciudad de Daroca.

Por épocas:

Por conjuntos urbanos y tipos de monumentos:

 

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© Fabián Mañas   Casa Palacio de los Luna

Escultura

Si bien existen ejemplos escultóricos de los más diversos estilos -islámicos, románicos, góticos-, el florecimiento de este arte se produce a partir del siglo XVI, cuando los murales y retablos pintados góticos ceden su sitio a retablos tallados en la decoración de las iglesias y ermitas de la comarca. La serenidad y clasicismo de las esculturas renacentistas de primera mitad del siglo XVI irán poco a poco dejando paso a la expresividad manierista hasta llegar al vitalismo barroco de los siglos XVII y XVIII.

No obstante, hay que señalar un hito anterior de extraordinaria importancia. Efectivamente, el cambio de la decoración pintada a la esculpida no surge de la nada, sino que encuentra un magnífico punto de inflexión y una firme base en el taller de escultura gótica organizado entorno a la Capilla de los Sagrados Corporales de la Iglesia Colegial de Santa María de Daroca. En él se formarán artistas tan importantes del Renacimiento aragonés como los Morlanes, padre e hijo, oriundos de Daroca.

No faltan tampoco conjuntos escultóricos más modernos, de época contemporánea

Pintura

Daroca y su comarca tuvieron un papel protagonista dentro del movimiento de los 'primitivos aragoneses', el interesante grupo de pintores góticos, muchos de ellos anónimos, que actuaron en Aragón durante la Baja Edad Media.

Estos artistas y los pintores foráneos que los formaron marcaron un hito en la Historia de la Pintura en Aragón que no se reproducirá hasta la época de Goya, los Bayeu y Luzán, en el siglo XVIII.

Se conservan tanto conjuntos murales, del siglo XIV y principios del siglo XV, como evolucionados retablos al temple y al óleo, del XV y principios del siglo XVI. Además se pueden admirar dos colecciones de tablas sueltas procedentes de retablos desmotados en el Museo Colegial de Daroca y en el Museo de Daroca.

A pesar de la extraordinaria riqueza de obras góticas, el patrimonio pictórico de la comarca se enriquece también durante la época renacentista, barroca y contemporánea.

Orfebrería

Daroca fue un centro comercial y artesanal de primer orden durante la Edad Media y el Renacimiento. Uno de los campos en los que destacó con especial brillo fue a través de la actividad de sus orfebres, expertos plateros, que vendieron su producción profusamente por toda la comarca histórica de Daroca. La existencia de minas de plata en Romanos, Cucalón y Montalbán facilitó el desarrollo de este arte e industria.

El concejo de Daroca, como otros ayuntamientos, garantizaba la calidad de la plata -o su ley- por medio de una marca estampada en la pieza, conocida como "punzón". Por ello, es fácil conocer las obras que fueron fabricadas en Daroca. También se puede conocer su fecha aproximada, pues dichas marcas fueron cambiando a lo largo del tiempo.

El cuidado de las gentes de la comarca por su patrimonio ha permitido que podamos contemplar en las localidades cercanas a Daroca el conjunto de piezas góticas más abundante conservado entre los salidos de una sola localidad. Se trata de un patrimonio impresionante en su conjunto por su valor artístico e histórico.

La orfebrería de Daroca se puede clasificar según los periodos clásicos del Arte europeo en tres grandes épocas:

La época de esplendor es, sin duda, el siglo XV, del cual datan estupendas obras góticas.

La tradición se mantiene durante el Renacimiento, y languidece víctima de la crisis económica desde el siglo XVII hasta el XIX.

Música

La música también ha sido cultivada en nuestras comarcas a lo largo de la historia, especialmente en su capital histórica, la ciudad de Daroca. Destacan sus organistas y maestros de capilla, algunos de los cuales alcanzaron  relevancia nacional.

El periodo de máximo esplendor de la música darocense fue, sin duda, el siglo XVII. Sin embargo, la tradición musical de la zona se remonta a la Edad Media y el Renacimiento, continúa en el XVIII, y sigue vigente en menor medida, durante los siglos XIX y XX.

 

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