Dr. Francisco Javier García Marco (Univ. de
Zaragoza)
Existe en Aragón un número considerable de iglesias construidas durante la segunda
mitad del siglo XVI y aún a principios del XVII que responden a modelos góticos, y que
sólo en las portadas expresan manifestaciones y estilo renacentista.
Muchas de ellas, las más rurales, tienen una sola nave de varios tramos con capillas
laterales entre los contrafuertes y ábside poligonal; se cubren con bóveda de crucería
estrellada, tanto la nave como las capillas.
Este modelo se repite en varias iglesia del entorno de la laguna de Gallocanta: es el
caso de Santed y Las Cuerlas, las más sencillas y de Used, con gran portada de piedra a
modo de retablo, posterior al edificio; en la provincia de Teruel, son de este momento la
de Bello, con airosa torre de piedra, y las de Odón y Torralba de los Sisones, en las que
hay que destacar sus bellas portadas.
Al mismo modelo responden las iglesias de Romanos, Badules, Villahermosa del Campo,
Rubielos de la Cérida, Villar del Salz y Fuentes Claras, ésta con sencilla portada
renacentista.
© Fabián Mañas Portada de la Iglesia Parroquial de
Torralba de Sisones
Otras iglesias, aunque cubiertas con bóveda de crucería estrellada, tienen ya tres
naves de casi la misma altura y están más próximas al modelo renacentista: es el caso
de las de Fuentes de Jiloca, Colegial de Daroca, San Martín del Río y Calamocha.
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