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Dr. Fabián Mañas
Es el ábside central de la antigua iglesia; en el cascarón, por encima de la falsa
bóveda de crucería, se conserva un conjunto de pinturas góticas de finales del siglo
XIV. Tiene entrada de arco apuntado doblado que carga sobre pilar y columna adosada; se
cierra con reja de forja del siglo XV a la que se quitó la crestería de chapa
sobredorada y policromada con decoración de grutescos, que se guarda en la sacristía. La
capilla queda dividida en tres estancias: la primera reservada a los fieles es
cuadrangular y de gran altura, cubierta con bóveda de crucería estrellada; en los lados
hay dos grandes arcos lobulados y conopiales con emblemas de los Reyes Católicos y de los
Corporales; sobre ellos, a modo de retablos, diversos santos de bulto sobre pedestales. El
frente es un gran retablo de piedra con tres arcos apuntados de tracerías góticas e
imágenes en las enjutas. Sobre los arcos, un friso de relieves con los evangelistas y la
Anunciación; en el ático, un Calvario y a los lados, ángeles con los emblemas de los
Corporales y Aragón. Es el llamado "jubé".
A través de los arcos de este retablo se pasa a la segunda estancia de forma
rectangular, cubierta con tres bóvedas de crucería con terceletas, una en cada tramo; al
frente queda otro bello retablo cuyo centro lo ocupa la Virgen con el Niño, flanqueada
por dos santas; tiene banco con cuatro figuras de bulto, que inicialmente fueron seis; en
el siglo XVIII se quitaron las dos del centro para practicar un óculo a través del cual
se viera el camarín de los corporales. Los laterales de esta segunda estancia o
presbiterio están ocupados por altorrelieves policromados en sepia con la historia de los
Corporales.
La tercera estancia es el camarín en donde se guardan los Corporales en una caja de
plata dorada del siglo XVI que a su vez de insertan en un arca en forma de armario , de
plata en su color con repujados vegetales de mitad del siglo XX
© Fabián Mañas Capilla de los Corporales
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