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Geología

Ovidio Ibáñez López
Luis Bolea Berné

Las Tierras de la Laguna de Gallocanta y las Sierras del Jiloca se encuentran geográficamente al sur de la provincia de Zaragoza y al noreste de la provincia de Teruel que, con el resto de esta provincia, constituyen uno de los enclaves geológicos más importantes de Europa desde el punto de vista paleontológico, estratigráfico, geomorfológico y estructural. En esta zona afloran rocas de todos los periodos, desde el Paleozoico hasta el Cuaternario.

Paleozoico

El Paleozoico representa materiales geológicos con una edad desde los 570 millones de años que marca el inicio, hasta los 230 millones de años. Aflora al noreste y al noroeste de la zona, en la Rama Aragonesa de la Cordillera Ibérica. También, aunque con una menor extensión, está en la Rama Castellana de la Cordillera Ibérica al Sur de la zona.

Están representadas todas las etapas del Paleozoico: Cámbrico, Ordovícico, Silúrico, Devónico, Carbonífero y Pérmico. Las rocas se han formado principalmente en ambientes marinos, predominando las pizarras, que son rocas arcillosas que en las sucesivas etapas diagenéticas han sido afectadas por importantes presiones que le han conferido el aspecto fisurado actual; calizas, rocas carbonatadas de origen marino que generalmente son muy fosilíferas; cuarzitas, rocas detríticas del tipo arena formadas por granos de cuarzo que al igual que las pizarras han sido sometidas a considerables presiones (por el peso de los sedimentos suprayacentes) y que la convierten en una roca muy dura y compacta.

Hay que destacar los yacimientos de Trilobites del Cámbrico Inferior y Medio de Murero, considerados los más importantes del mundo por muchos paleontólogos, y que durante mucho tiempo ha sufrido expolio. En la actualidad la D.G.A. ha decidido protegerlos a iniciativa de la Cátedra de Paleontología de la Universidad de Zaragoza. Son también reseñables los yacimientos de Braquiópodos y bivalvos.

Mesozoico

El Mesozoico se extiende desde los 230 millones de años hasta los 65 millones de años, y están representadas todas las etapas Triásico, Jurásico y Cretácico. Aflora al noroeste y sur de la Rama Aragonesa de la Cordillera Ibérica y en menor medida al noreste de la zona.

La base del Triásico marca el paso del Paleozoico al Mesozoico y se caracteriza por presentar areniscas y arcillas, dolomías (carbonatos cálcico-magnesicos), margas y yesos. Son reseñables las areniscas y de las arcillas de esta etapa, que se denominan genéricamente como buntsandstein y que presentan unas morfologías rojas extraordinariamente bellas.

Las rocas del Jurásico se han formado en medios sedimentarios marinos fundamentalmente de plataforma marina, es decir en zonas marinas someras y de aguas cálidas, zonas arrecifales con gran desarrollo de corales, bivalvos, ammonoideos, etc. (ambiente similar a la actual barrera coralina de Australia). Las rocas desarrolladas durante este periodo son generalmente calizas (carbonato cálcico) y margas (carbonato cálcico y arcilla). Los fósiles característicos del Jurásico son los ammonoideos.

El Cretácico se caracteriza por presentar sedimentos de origen marino y continental (ríos, zonas pantanosas, lagos). Las rocas generadas varían en función del medio sedimentario, aunque predominan las de origen carbonatado calizas y margas también se forman rocas detríticas areniscas y conglomerados.

Terciario

El Terciario constituye más de la mitad de los materiales geológicos de la zona. Abarca temporalmente desde los 65 millones de años hasta los 2 millones de años. Aflora entre las dos unidades que forman la Rama Aragonesa de la Cordillera Ibérica, extendiéndose hacia el sur formando lo que se denomina la Depresión Terciaria de Calatayud-Teruel. Las rocas son de origen continental. Durante este periodo se forman cuencas internas continentales, en las cuales se van sedimentando conglomerados, areniscas, arcillas, margas, calizas y yesos en función de la energía y de las características del medio sedimentario. Estos lagos formados en el Terciario se van evaporando a lo largo de todo el Terciario.

Cuaternario

Una vez desecados los lagos que habían generado la mayor parte de las rocas del Terciario comienzan a desarrollarse diferentes redes hidrográficas generándose depósitos de terrazas y glacis asociados a éstas.

En la zona de Gallocanta se crea un área endorréica alrededor de la laguna y que generan depósitos lacustres aportados por la red fluvial que alimenta esta zona. Además del interés geológico la Laguna de Gallocanta y sus alrededores constituyen una zona con una alto interés ecológico no siempre bien comprendido.